Cap. 4

Yo: ¿Qué te ha hecho creer que quiero salir de aquí? - Dijó con un tono amenazante -
Él: Te conozco más de lo que crees conocerte a ti misma, se cuanto amas tu libertad, cada expresión, cada movimiento y las palabras que dirás, me las se de memoria y aún asi creyendo conocer todo de ti, me has sorprendido otra vez, estado atrapada en este miserable lugar, por un sentimiento nuevo, miedo.
Yo: ¡No tengo miedo! - Se acercó, clavando su mirada en la mia - No sabes lo difícil que es que alguien como yo viva aqui, siempre rodeada de murmullos, el no poder caminar libremente por la calle, sin recibir una ofensa de alguien ¡mirame! - Gritó cuando evadi su mirada - solo tengo 19 ¡maldita sea, solo 19! y tengo que soportar toda esta mierda
Él: ¡Tú no tienes 19, ni tu ni yo pertenecemos a este lugar, eres mas fuerte que ellos, puedes hacer lo que quieras, incluso que te pidan perdon de rodillas! - La sujete por los hombros, pero ella se alejó -
Yo: Que tu seas un lunatico, no me hace a mi serlo. Estoy en este lugar porque ha sido mi unico escape a todo, a mi realidad, pero más que nada, estando encerrada puedo asegurar sus vidas

Algo inusual se creo en sus ojos, de nuevo estaba haciendo algo que jamás imagine, un extraño liquido comenzó a salir de estos, sus rasgos cambiaron, irradiaba algo muy extraño, un pesar horrible, sus hermosos ojos y cabello ahora eran azules, un azul pastel, no habia ese brillo usual en su mirada, vacio y odio llenaban sus mirar.

Él: ¿Qué esta sucediendo contigo? - Esta mas que consternado -
Yo: ¿A caso no vez? ¡Estoy llorando! - Se pasó la mano para secar sus mejillas - escucha, no se que eres ni lo que quieres pero es mejor que te cambien de habitación
Él: Te lo dijé antes, vine a rescatarte y llevarte de vuelta a la galaxia a la que pertenecemos
Yo: ¡Ya basta con tus estupideses!
Él: ¡No lo son!, Se que cuando te besé pudiste ver Zafíro y los mundos en los que te has estado escondiendo de mi
Yo: -Le tomo un tiempo reaccionar -¿Còmo sabes eso? 
Él: Es la prueba de que lo que digo es cierto
Yo: Esto ya no es divertido, yo nunca te he visto -dijo temblorosa - ¡nisiquiera se tu nombre!
Él: H290B993 es el nombre que me asignaron, pero puedes llamarme HongBin y tu eres X140Z245, mejor conocida como ______ - Sonreí -
___: Estas demente mi nombre es Alexandra, no ______ - Dijó molesta -
H.B: Es parte del camuflaje y tu capacidad de adpatación al mundo en el que te encuentras - Sujeté su rostro - ¿Recuerdas tu infancia?

-     Narra Ella     -

Este tipo solo habla cosas sin sentido aúnque, ¿Infancia?, no tenia recuerdos de antes de mis 16. Hubó un accidente de auto, mis padres murieron en el, los doctores decían que la impresión de su perdida habia sido demasiado para mi, que mi cerebroo borró cualquier recuerdo de ellos para no sufrir, así que técnicamente no tenia algo como eso.
Estuve en el hospital un par de días, cuando unos hombres vestidos completamente de negro me llevaron a un laboratorio, ya que encontraron una sustancia radioactiva en mi sangre, en el catorceavo intento por meter una aguja en mi piel; el hospital no quizó tomar ningún tipo de responsabilidad sobre mi. Pase días encerrada en una jaula de cristal, las personas me miraban y anotaban cosas, mi aspecto cambiaba constantemente debido al miedo. Comprendí que tendía que salir de ese lugar.
Estudié cada movimiento que hacían, memoricé los horarios en los que estaban en el laboratorio, todo, abosolutamente todo.
Todo estaba planeado, escaparía de ese lugar en un horas, veía transcurris los minutos en el reloj, la ansiedad me consumía, entoces algo extraño ocurrió, todos salieron del lugar corriendo, llevaban una camilla y equipos de todo tipo, nadie se quedó en el laboratorio, ese justo ese momento era lo que necesitaba para salir de ese horrible lugar...